Eres más que un muñeco (aporte).
En aquel corto instante posterior a la segunda indebida pregunta lanzada al azar, la mente de la mujer de rizos cabellos daba vueltas sin parar, como si de una ruleta rusa se tratase, y es que pensó un millón de opciones, respuestas y maneras de evadir el disparo que tal pregunta representaba. Una sola opción de pronto comenzó a ser la única respuesta válida ante tal situación, y es que por muy falsa que fuese el contenido de esta, resguardaba el orgullo de si misma, por mucho que doliese reconocerlo. Su cabeza de pronto reaccionó al cabo de un millón de años que se traducían en un segundo en la realidad. Movió su cabeza de Este a Oeste, dejando más que claro la negación de su respuesta. El extranjero de la ciudad rodeada de láminas de Zinc y obscuros cielos premeditó tal respuesta, sabía lo tan estúpida que era para arrojar una mentira como esa, se burló de ella, pisándola como uno de los tantos trapos que quedaba por pisar. Ella, por su parte, disimuló su disgusto de la manera m...