Imagina.

Imagina a una persona "relativamente feliz" que cumple su rutina día con día y con un punto de vista peculiar, algo maduro para su edad, pero cierto. Imagina que esa persona encuentra a alguien muy diferente a él pero con la que posee cierta atracción.

Imagina a esa misma persona, luego de un tiempo, feliz, con la persona que encontró, y disfrutando el momento. Luego, quizás en un lapso un poco menor, llegan las diferencias, notan que poseen puntos de vista y objetivos distintos.

Aparecen los conflictos, si cabría llamarles así, que poco a poco degradan lo que se tenía. Ya de aquel "amor" solo quedaba una pizca o quizá nada...

Imagina que ella se aleja, simplemente le deja, y decide continuar su camino. Dice que sus diferencias pueden más, que nada es lo mismo, que no desea continuar... imagina que dice todo esto y se va.

Imagina lo que pasa con él, aún con algo de ese amor en su interior. Imagina lo que siente o como se siente verla, por ahí, sin él a su lado. Imagina que está solo, con miles de emociones encontradas, deseando olvidar todo, extrañándola, con los recuerdos de aquello que sucedió, con ganas de convertir todo lo que siente en uno de sus escritos... porque, al final, en eso se convertirá lo que siente.

Entonces... imagina que él realiza un escrito.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

-1

Querido mejor amigo.